Este palacio de estilo renacentista se construyó entre 1572 y 1584, y en él destaca el pórtico de columnas y la cuidada traza de sus ventanas.
Desde 1945 es la sede del Museo Arqueológico Municipal Camil Visedo Moltó, y en su interior se muestran colecciones de arqueología, entre las que destacan las cerámicas del Neolítico y unas inscripciones ibéricas sobre láminas de plomo.
Estas colecciones y el edificio que las custodia merecieron en 1962 la declaración de Monumento de Interés Artístico Nacional.